Miles de cubanos en Estados Unidos poseen el formulario I-220A, una orden de supervisión emitida por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) que no equivale a un parole, lo que les impide acogerse a la Ley de Ajuste Cubano, la cual permite obtener la residencia permanente desde 1966.
Como resultado, estos cubanos enfrentan un limbo legal, pese a sus intentos de llamar la atención de la administración de Joe Biden y a la presión ejercida por organizaciones de apoyo que demandan soluciones legales para ellos. En este contexto, la posible llegada de Donald Trump a la presidencia en enero genera incertidumbre, ya que el republicano ha prometido implementar un plan de deportaciones sin precedentes.
Fuente: AmericaTeVe